Viajeros del siglo XIX en Canarias

Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia

Caldera de Bandama

El cráter más importante de Gran Canaria, y quizás incluso uno de los más notables que hay en la superficie terrestre, es la Caldera de Bandama, que se encuentra al sur de Las Palmas, a una distancia de una milla alemana. Mucho antes de llegar a este inmenso agujero la gran cantidad de pequeño lapilli negro que se extiende a su alrededor hace sospechar su existencia. […]

El lapilli forma capas poco espesas, que descansan unas sobre otras siguiendo la pendiente del cono, lo que permite calcular su inclinación. […] Entre el lapilli negro que forma los bordes del cráter se ve una gran cantidad de materiales escoriformes y enormes bloques. A cierta profundidad las paredes del cráter están formadas por un conglomerado cuya masa principal es una especie de wacke, sin mica ni hornablenda, en el que hay empastados pequeños fragmentos amigdaloides, cuyos nódulos están llenos de aragonito en agujas; también se ven bloques de basalto y muchos trozos traquíticos. Este conglomerado forma la masa de unos peñones que se extienden, al menos en la parte septentrional, desde lo alto hasta casi el fondo del cráter.

Casa en la Caldera de Bandama, Stone 1887 Casa en la Caldera de Bandama, Stone 1887 […] Se intentaría en vano buscar las coladas de lava pertenecientes a este cráter o que hayan sido arrojadas desde sus faldas. En el interior, en el fondo no se ve nada que se pueda considerar una colada o antigua lava fluida. Incluso es probable que ese cráter tan bien conservado no haya arrojado nunca productos de esa naturaleza; en efecto, normalmente los puntos por donde se abre paso y fluye la lava en un cráter se reconocen por las partes quebradas o totalmente derruidas de sus bordes.

[…] Sin embargo, es difícil creer que la actividad volcánica que formó ese cráter tan grande no haya tenido la suficiente intensidad como para producir una colada de lava; quizá esas lavas, al mismo tiempo y en las cercanías, produjeron un cráter más pequeño por el que se abrieron paso para extenderse a continuación por la superficie. Me siento muy inclinado a creer que la colada de Jinámar pertenece a la Caldera de Bandama y que salió por una boca volcánica relacionada con este cráter.

Leopold von Buch, Descripción física de las Islas Canarias (1825)

Traducción de José Antonio Delgado Luis