Costumbres
“Recuerdo que una vez que hice escala en la isla de La Gomera para hacer aguada contraté a unos pescadores pobres y harapientos para que nos llenaran los toneles de agua y los llevaran a bordo. Poco tiempo después me fui al lugar de la aguada para ver cómo avanzaba el trabajo y encontré los toneles llenos y listos para rodarlos hasta la playa y los pescadores estaban allí al lado, hablando entre ellos como si no tuvieran nada que hacer. Los reprendí por su indolencia en no apresurar el encargo para el que los había empleado y uno de ellos, con aire desdeñoso, me contestó: “¿Quién cree usted que somos, señor? ¿Piensa que somos cargadores? No señor, somos marineros. A pesar de mi insistencia y de mis promesas de recompensa no pude conseguir que ninguno de ellos pusiera las manos en las barricas para hacerlas rodar hasta la orilla del mar, sino que me vi obligado a contratar cargadores.”
George Glas, 1764
Traducción de Francisco Javier Castillo y Carmen Díaz Alayón