Proyecto Bachillerato

Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia

Santa Cruz. Calles y casas

“Santa Cruz es bastante grande, construida de forma muy diferente a nuestras ciudades francesas pero que no es menos agradable; las calles que en general son derechas y medianamente anchas, están limpias y aireadas; hace poco tiempo que la mayorías están empedradas, sobre todo a lo largo de las casas, donde se forman una especie de aceras con pequeñas piedras redondas, gruesas como los huevos, bordeadas por piedras cuadradas mayores, que las sostienen; el conjunto está a cuatro o seis pulgadas por encima del nivel de las calles y de las plazas, cuyo centro con frecuencia no está empedrado, sino lleno de rocalla y polvo.

Las casas están pasablemente construidas, en adobe o piedras; se han preocupado de blanquearlas e, incluso, abigarrarlas, lo que da un aspecto limpio a la ciudad; estas casas están distribuidas en grandes habitaciones. Primero se entra por un espacio considerable que va desde la puerta de la calle a la del patio y que tiene un olor repugnante, pues, como es indecente orinar en las calles, los transeúntes prendidos por esa necesidad entran sin modales y encuentran detrás de los batientes de la primera puerta una pequeña baldosa para satisfacerla. El patio es amplio, adoquinado en general con grandes piedras cuadradas. Normalmente, allí se encuentra un pozo; el primer piso lo domina por todas partes, con vastas y espaciosas galerías de madera, sostenidas por postes, y todas con vidrieras o ventanas de corredera; los dibujos y adornos son góticos o moriscos. Al primer piso se sube por una bella y ancha escalera de madera, siempre situada a un lado, continuamente barrida, pulida, bastante clara, que conduce a una de las vastas galerías. Las habitaciones son enormes, entarimadas, con puertas muy grandes, que tienen cinco, seis, o siete ventanillas, y con celosías, cuyas rejillas son muy estrechas. Están enjalbegadas, no tienen otro techo que el maderaje y generalmente están adornadas con algunos cuadros religiosos esparcidos por aquí y por allá.

Generalmente, estas casas tienen uno o dos pisos; son tristes, aunque claras; todo es demasiado espacioso; en ellas nadie puede ensimismarse. Me parece que, una vez en casa, al hombre de mundo le gusta encontrar un pequeño lugar donde pueda estar solo un momento consigo mismo; pero en esas grandes habitaciones y esas galerías, que tienen el aspecto de plazas o calles y donde con frecuencia hay que dar cincuenta pasos para ir a buscar una silla, se siente uno más en cualquier parte que en una casa. Por otro lado, se gana frescor a costa de la alegría, lo que, encontrándose cerca de los trópicos, es mucho. Las casas que no están rematadas con argamasa, están cubiertas con tejas, como las del sur de Francia.”

Cap. IV, p. 236, Essais sur les Îles Fortunées et l’Atlantide ou Précis de l’histoire de l’Archipel desCanaries, Bory St. Vincent, Paris, 1803

Preguntas

  1. Determina tres características de la ciudad de Santa Cruz
  2. Escribe cinco características de las casas de Santa Cruz
  3. Según Bory, ¿qué ventajas e inconvenientes tienen las habitaciones grandes?