Proyecto Bachillerato

Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia

Santa Cruz de Tenerife y la mendicidad

El extranjero que ve por primera vez la población de Santa Cruz y de sus alrededores, experimenta tanto asombro como asco. No sabe qué le debe afligir más, si el cuadro de la degradación de la especie humana o el descuido verdaderamente culpable del gobierno. Por todas partes, y en todos los barrios de la ciudad, encuentra una infinidad de mendigos harapientos, casi desnudos, cuya mayoría muestran a los ojos de los transeúntes llagas y úlceras, verdaderas o simuladas, y cuya curación demoran a propósito. Los niños corren por las calles sin ninguna clase de vestido; sus cuerpos, lívidos y demacrados, son de una suciedad escandalosa; toda esta chusma, enemiga del trabajo, no piensa en conseguir buena posición; pasa la noche acostada en los bancos, cerca de las casas, y no desea otro domicilio; se contenta con una pequeña limosna o con algunos desechos de comida que les distribuyen en las casas particulares o de conventos. Son sobre todo las mujeres quienes mendigan con más empeño y, además, colman de injurias a quienes rechazan darles alguna moneda. Los mendigos de las posesiones españolas no tienen, en general, la dignidad de esos pordioseros italianos que, al solicitar la caridad, le muestran la recompensa en el cielo y dicen: Fate mi ben per voi.

Los frailes y las órdenes mendicantes son muy numerosos y parecen gozar entre el pueblo de una gran consideración; normalmente, cuando los hombres encuentran a un sacerdote, se posternan ante él y éste les presenta una de sus mangas para que se la besen.

¿Cómo es que los frailes, cuya influencia es tan grande y sus consejos tan respetados, no invitan a esos desgraciados a buscar en el trabajo los medios para salir de esa degradación?

Viaje Pintoresco a la Isla de Tenerife, 1996, traducido por Jose A. Delgado Luis.

Preguntas

  1. ¿Cómo son los mendigos de Santa Cruz?
  2. ¿Qué diferencia encuentra Milbert entre éstos y los mendigos italianos?
  3. ¿Cuál sería una solución para la miseria de estos mendigos?