Imagen de la semana 7 de marzo de 2008
© Proyecto Humboldt. Cedido para su digitalización por el Jardín de Aclimatación de Plantas de La Orotava
Tango (herreño) bailado por un habitante de la isla de El Hierro
Fuente bibliográfica: "Histoire naturelle des îles Canaries I, 2. Les Miscellanées Canariennes. Planches." (Barker Webb, Phillip, 1839)No es difícil imaginar que Berthelot y Webb incluyeran este dibujo de Williams en sus Misceláneas Canarias seducidos por el deleite de presenciar una bella ejecución del tango herreño. Esta tradición ancestral, pieza fundamental del llamado "folclore de tambor", es un baile de cortejo interpretado por varias parejas. Tras una dura faena agrícola colectiva, o en los festejos dominicales y populares, esta danza amorosa no tardaba en aparecer al ritmo de los tradicionales tambores herreños de grandes dimensiones, pequeñas chácaras, una voz solista, y todo ello usualmente acompañado por la melodía de una flauta travesera o pito. La canción, verdaderamente peculiar, consiste en un estribillo ininteligible ("lan lan liri ni") intercalado por coplas de cuatro versos de "aliento entrecortado", esto es, con palabras partidas en las que las primeras sílabas pertenecen a un verso, y el resto al siguiente.
Gracias a diversas agrupaciones folclóricas esta danza no ha quedado definitivamente en el olvido, relegada paulatinamente a causa de las modas traídas por los indianos a finales del s.XIX en las que sólo se practicaban los bailes de cuerdas. Tanto es así, que hoy en día ya a muchos canarios les cuesta creer que los nombres de "tango de la Florida", "tango jerreño", o el mismo "tango herreño" denominen piezas de folclore popular canario y nada tengan que ver con los tangos sudamericanos.
Texto: David D. Estévez Durey