Viajeros del siglo XIX en Canarias

Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia

Líneas marítimas a Canarias

Las Canarias están a 2.500 kilómetros de los grandes puertos de mar como Le Havre, Liverpool y Marsella, una distancia que se puede recorrer en barcos de vapor en casi ocho días. […] Son barcos de la Compagnie des Chargeurs Réunis, que parten de Le Havre los días 5, 15 y 25 de cada mes, y cuya primera escala, en ruta hacia América del Sur, es Tenerife. La Compagnie Générale Transatlantique recala en Burdeos y La Coruña; sus barcos salen de Le Havre el día 2 de cada mes y tardan unos diez días hasta Santa Cruz. Los vapores de la African Steam Ship Company parten desde Liverpool los días 5, 9 y 26 de cada mes. Hacen escala en Madeira durante algunas horas y llegan a Santa Cruz al cabo de ocho días.

Quien no tema el largo viaje en tren hasta Cádiz puede acortar significativamente el viaje marítimo, porque todos los días 1 y 17  parte un pequeño vapor que lleva el correo español a las Islas, desde ese puerto andaluz hasta Santa Cruz, y el viaje dura tres o cuatro días. Y al que le sea indiferente permanecer alrededor de una semana en altamar se le ofrece, finalmente, el vapor de la Compagnie Paquet et Cie, que parte de Marsella cada mes los días 7 y 22, hace cabotaje a lo largo de la costa española hasta Gibraltar y luego sigue la costa marroquí, permaneciendo en cada puerto el tiempo necesario para la carga y descarga de las mercancías y lo que las condiciones del mar exijan, internándose en mar abierto sólo desde Essaouira, para desde allí arribar a Tenerife. En verano, con mar en calma, se puede realizar este viaje en diez días.

Hermann Christ, Un viaje a Canarias en primavera (1886)

Traducción de Karla Reimers Suárez y Ángel Rodríguez Hernández

La creación del Puerto de La Luz ha dado un vigoroso impulso a las transacciones comerciales. En 1883 sólo atracaron en Las Palmas 236 barcos de vapor. En 1887 esta cifra ha ascendido a 660, casi triplicándose en tres años. En 1888 el número de vapores fue de 983 y en 1889 han alcanzado la cifra de 1.180. En Santa Cruz de Tenerife, la capital de la provincia, solamente atracaron 753 en 1888 y 911 en 1889. Todos estos navíos descargan y embarcan mercancías.

René Verneau, Cinco años de estancia en las Islas Canarias, (1891)

Traducción de José Antonio Delgado Luis