François Rançois Péron
(Cerilly, 22 / 8 /1775 - Cerilly, 14 /12/1810)
Péron se alistó en la armada revolucionaria en 1792. Como resultado perdió un ojo y fue encarcelado. Más adelante comenzó a estudiar medicina, pero abandonó este propósito al enterarse de la posibilidad de formar parte de la expedición comandada por Nicolas Baudin. Luchó y apeló a sus influyentes amistades para conseguir entrar en la nao que iba a poner rumbo al continente australiano. Baudin aceptó a Péron a bordo en el último momento.
Ambos personajes escribieron al final sus propios relatos del viaje, sin embargo acabaron también los dos siendo enemigos a ultranza. Péron acusaba a Baudin de obstinado, voluntarioso, incompetente respecto a la navegación y experto hacedor de enemigos. Baudin por su parte le culpaba de cualquier problema al que se enfrentara la expedición, sobre todo de aquellos que escapaban al propio control de Baudin.
La expedición se había planeado desde un principio con gran boato: unos veinte científicos, tres barcos, grandes objetivos... La Francia de Napoleón tenía una visión mucho más grandiosa respecto a este viaje que la que tuvo Inglaterra con el de Flinders. Sin embargo, los resultados no fueron tan gloriosos. Las enfermedades (especialmente escorbuto y disentería) hicieron estragos.
Tras una primera escala en Tenerife llegan a isla Mauricio, donde un número considerable de científicos y dibujantes abandonaron la expedición, sobre todo por motivos de salud. De los hombres que continuaron el viaje sólo sobrevivieron siete.
La merma en la tripulación tuvo como consecuencia que se elevara de rango a los jóvenes que quedaban: Charles Alexandre Lesueur (dedicado a la historia natural), Nicolas Martin Petit (paisajista) y François Péron (zoólogo de segunda fila al comienzo y ahora zoólogo jefe). Péron ejerce de maestro con Lesueur y Petit. Introduce al primero en las cuestiones botánicas, zoológicas y de taxidermia y gracias a estas enseñanzas Lesueur adquirió mayor destreza y mejoró la reproducción del detalle en sus dibujos. A partir de aquí Lesueur atrapó, mató, disecó y dibujó animales en perfecta pose científica. Al final de la expedición (1804), Péron y Lesueur crearon la colección más completa y mejor documentada de historia natural: unas cien mil especies de animales.
Sin embargo, hasta 1806 no se publicaron los resultados de la expedición. Sólo entonces Napoleón dio permiso para editar los hallazgos de Péron y Lesueur. El entusiasmo de la República por explorar y conquistar las lejanas tierras australianas había dado paso al desinterés por los resultados en el campo de la historia natural. Péron como escritor y Lesueur como dibujante dieron a luz su Voyage de découvertes aux Terres Australes, cuyo primer tomo aparecía en 1807 (el segundo se hizo esperar hasta 1810, cuando Péron ya había muerto de tuberculosis). Paralelamente Péron redactaba Mémoire sur les éstablissements anglais à la Nouvelle Hollande, cuyos textos combinaban el trabajo científico y las duras críticas a Baudin.
Obra relativa a Canarias
Voyage de découvertes aux terres australes exécuté par ordre de Sa Majesté l'Empereur et Roi, sur les corvettes Le Géographe, Le Naturaliste et la Goelette La Casuarina pendant les années 1800, 1801, 1802, 1803 et 1804. Publié par Décret impérial, sous le ministère de M. de Champagny, et rédigé par M.F. Péron, Naturaliste de l'Expédition, Correspondant del'Institut de France; de la Société de l'École de médecine de Paris, des Sociétés philomatique et médicale de la même ville, París, Imprimerie impériale, 1807, 2 vols. Péron no pudo terminar su relato del viaje con la expedición de Baudin. La enfermedad contraída a bordo se lo impidió. Louis de Freycinet acabará la obra. Péron fue enviando al Museo de Historia Natural, a la Sociedad de Medicina de París y al Instituto de Ciencias algunos episodios del viaje, sobre todo en lo relativo a la parte zoológica y botánica. Mémoires du Capitaine Péron sur ses voyages aux côtes d'Afrique, en Arabie, à l'île d'Amsterdam, aux îles d'Anjouan et de Mayotte, aux côtes Nord.Ouest de l'Amérique, aux îles Sandwich, à la Chine, etc., París, Brissot-Thivars libraire, 1824, 2 tomos. A sus 55 años, Péron relata el primer viaje de su vida (tenía entonces 14 años). En las primeras páginas de la obra hace una descripción de Tenerife y del Teide. * Notes sur les Canaries et particulièrement sur Ténériffe. Se trata de un manuscrito de once páginas que ha sido transcrito por Jacqueline Bonnemains.