Viajeros del siglo XIX en Canarias

Fundación Canaria Orotava de Historia de la Ciencia

El clima de Canarias

He dicho que los canarios gozan de un clima sano y para probarlo me bastará citar algunas cifras. […] La temperatura es perfectamente soportable. Ya sabemos que raramente sobrepasa los 35º centígrados a la sombra durante el verano y que baja, más raramente todavía, a 10º durante el invierno. Dada la configuración del país es fácil encontrar el clima que se desee. Cerca del mar la temperatura es siempre bastante alta, pero en invierno baja de manera uniforme a medida que aumenta la altitud. […] En verano las cosas varían un poco.

Santa Cruz, 1888 Santa Cruz, 1888

La temperatura es más alta cerca del mar y en las localidades por encima de los 800 metros. Los pueblos situados entre los 200 y los 600 metros tienen la temperatura más baja. Así resulta que las localidades situadas a una altitud mediana son las que ofrecen las diferencias más tenues. […] Podemos, pues, afirmar que Canarias goza de uno de los climas más constantes de la tierra.

[…] Después de lo que he dicho de la temperatura y de la escasez de lluvias se podría creer que se respira un aire seco, susceptible de irritar las mucosas, pero no ocurre nada de eso. Si la lluvia es muy rara no es porque no exista vapor de agua en la atmósfera, sino porque no se condensa.

La excelencia del clima de Canarias sería fácil de demostrar con otros informes. Me limitaré a decir algunas palabras sobre las oscilaciones barométricas. La altura media del barómetro en Las Palmas durante todo el año es de 766 milímetros. He visto años en que la amplitud de las oscilaciones no ha superado los 13 milímetros.

René Verneau, Cinco años de estancia en las Islas Canarias (1891)

Traducción de José Antonio Delgado Luis